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Buenos Aires, luna llena, Noviembre 2005.

Todo ser humano que conf

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Buenos Aires, luna llena, Noviembre 2005.

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Presentation Transcript


    1. Buenos Aires, luna llena, Noviembre 2005.

    2. Todo ser humano que confa en su intuicin, tiene posibilidades infinitas de crecimiento.

    3. Tiene seguridad en si mismo. No teme, porque est centrado en su Ser.

    4. Tiene esperanza Se mantiene firme como un faro. Confa en su Ser.

    5. La Luz del Faro Cyro Rodrguez Barrios

    6. Foto-Sntesis Dos semanas de historia.

    7. Foto-sntesis 2 Retiro en Bella Vista 5-6 de Noviembre 2005. Si quieres ver todas: http://www.cyro.com.ar/pagina_principal.htm

    8. La Luz del Faro Noviembre 2005 ndice: Editorial: El sonido secreto del silencio Cyro Rodrguez Barrios Psicologa: Abriendo caminos Gonzalo Bosch White Hatha Yoga: Ardha Matsyendrasana. Torsin simple. Diego Cano Literatura: Nada nuevo bajo el sol Marcela Vanmak Msica: Hugo Fattoruso. Dos temas en MP3.

    9. El sonido secreto del silencio. En todo momento la mente busca el silencio aunque no nos demos cuenta. Es fundamental reconocer esta cualidad, para poder estructurar nuestra vida. Los ruidos llegan al cerebro a travs de los odos, provocando una serie de reacciones qumicas que son transmitidas al sistema nervioso. Los ruidos tambin son vibraciones que se perciben por el sentido del tacto. As, este ltimo percibe la informacin de igual manera que los odos y a veces con mayor intensidad. Podemos reconocer dos clases de ruidos, los externos y los internos. Hablamos de los externos cuando nos referimos a los ya conocidos por todos: vivir en una gran ciudad, superpoblada, en la que millones de personas y cosas emiten de manera continua vibraciones al medio ambiente. Nos referimos a los internos cuando por diferentes razones las personas viven situaciones estresantes las que generan estados de conciencia negativos, no constructivos contribuyendo a cargar de negatividad no slo a la propia conciencia sino tambin al medio ambiente. Afortunadamente, algunas personas no sienten el efecto devastador del estrs y colaboran neutralizando la densidad del ambiente convirtiendo la misma en proyectos que benefician el entorno. De alguna manera, estas personas son catalizadores humanos, nacieron con estas facultades o las desarrollaron a travs de la meditacin trascendental. Investigaciones realizadas en los aos 80 muestran claramente que si el 1% de la poblacin de una ciudad meditase, se reducira sustancialmente la negatividad del medio ambiente logrando disminuir los porcentajes de accidentes automovilsticos, de acciones delictivas, del consumo de alcohol, drogas y enfermedades, logrando vivir en plenitud.

    10. Un individuo pleno es un generador de felicidad en su entorno. Es aquel que puede entrar y salir tanto del ruido como del silencio. No tiene tensiones, logra enfocar su atencin en sus objetivos, se comunica espontneamente con otros, enfrenta las dificultades con mayor seguridad, conserva su energa y su salud permaneciendo con el espritu joven. Escucha y disfruta del silencio, sabe dnde est y va a su encuentro. Luego, regresa al ruido y este ya no le molesta, porque se ha conectado con su paz interior, con su Ser. Cyro Rodrguez Barrios cyrorb@gmail.com

    11. Gracias Por esta oportunidad de estar juntos

    12. Abriendo Caminos Desde la niez en adelante, todos aprendimos a lidiar con una situacin complicada, donde las sensaciones y percepciones ms bsicas se mezclaban muchas veces unas con otras. La vida sera ms sencilla si pudiramos ver directamente los cristalinos ideales, la maravilla y la belleza que estn en el corazn de la vida, es decir en nuestro propio corazn. Hasta que las mscaras no se bajen definitivamente de nuestras mentes, la belleza de esa mujer permanecer a la distancia. Durante muchos aos, la represin ha sido la causante de las grandes enfermedades del hombre y ha regido su comportamiento sin permitirle vivir espontneamente. Las religiones, los mandatos familiares y las estructuras y preconceptos mentales formados a partir de lo que nos impone la sociedad no nos dejan vivir una vida sin condiciones y sin limites donde se pueda expresar sin barreras nuestra esencia ms intima. La mente no puede liberarse por medio de ninguna actividad mental, sea por esfuerzo, vigilancia o represin. Escapar del pensamiento por medio del pensamiento es lo mismo que tratar de salir de las arenas movedizas jalando de nuestro propio pelo. En el fondo, cualquier tipo de pensamiento, por ms positivo que sea, continua estando en los dominios del pensamiento. La mente no es solo pensar. La mayora de los occidentales, estamos acostumbrados a enredarnos en laberintos y/o torbellinos de pensamientos, que lejos de liberarnos nos hacen ms esclavos de nuestras emociones. En realidad, el pensamiento es slo una de las mscaras de Maya (palabra que en Snscrito significa Ilusin), menos slida que cuanto vemos y tocamos, pero igualmente indigna de confianza. El nico medio posible de escapar de Maya (nuestros miedos, fantasmas mentales, preconceptos, etc.) es trascender ms all de la ilusin para experimentar las realidades ms profundas de nuestro Ser y as poder entrar en contacto con nuestra fuente interna de Inteligencia y Creatividad. Se necesita un cierto cambio de Conciencia para liberarnos de las barreras de la represin y ver la realidad con ms amplitud y claridad, apreciando y disfrutando la belleza de la vida y de cada ser urbano.

    13. Usted piensa que oponerse a sus pensamientos negativos le resta potencia? En realidad es slo demorar el momento en el que saldrn a la superficie de un modo u otro. Quizs usted utilice mucho tiempo de su da en no pensar negativamente, y por ende, eso ha de requerirle una vigilancia y esfuerzos constantes. Pero, tan pronto como se afloja esa presin, afloran los sentimientos negados con doble intensidad. Muchas veces, los pensamientos negativos vienen por s solos pese a la oposicin ms fuerte. Esto es algo que todos debemos aceptar. Si rechazamos los pensamientos que no nos parecen aceptables perderemos siempre. La represin supone la fuerza del Yo que pone una barrera a lo inaceptable. A su vez, la represin de una pulsin crea angustia, y la energa reprimida no permitir la satisfaccin. Al encontrarse bloqueada una pulsin no se logra la satisfaccin. Cuando reprimimos un deseo hay una lucha entre dos fuerzas, y un deseo que no puede satisfacerse en la realidad origina frustracin. Cuando se da la frustracin la energa libidinal busca otro camino para la satisfaccin y tenemos el sntoma (alguna fobia, algn problema somtico o corporal, etc.). Ahora bien, Se puede renunciar a todo este juego? Son muy pocas las personas que tienen en cuenta esta alternativa. Es necesario encontrar y abrir otro camino, cuya diferencia es simplemente que la mente no es slo pensar. La nica manera para romper este esquema es dejar de pensar para comenzar a sentir, trascendiendo el nivel consciente del pensamiento. Gonzalo Bosh White gonzalobw@gmail.com

    14. HATHA YOGA Ardha Matsyendrasana. Torsin simple. Contraindicaciones: Este asana no es fcil en su ejecucin tcnica, pero no es fatigosa en lo que respecta al esfuerzo muscular, por ello no existen contraindicaciones mdicas. Ahora las personas que presentan una columna vertebral o msculos muy rgidos debern practicarla con moderacin y de manera gradual, ajustando su cuerpo a la tcnica. Debe evitarse el excesivo esfuerzo de codo para aquellos que presenten lesiones en el mismo. Indicaciones: Nunca fuerce las posturas. Siga la tendencia natural de su cuerpo. El beneficio es mayor cuando se persigue la estabilidad, la comodidad y una duracin moderada. Mientras sostiene la postura lleve la atencin hacia el flujo de la respiracin y al movimiento que este produce en el cuerpo. En caso de haber pensamientos djelos pasar, no los juzgue o desarrolle. Vuelva la atencin al movimiento. Recuerde que durante este proceso se liberan tensiones que aparecen en la mente en forma de pensamientos.

    15. Posicin de partida: Sentado con las piernas estiradas. Flexione la pierna derecha sobre la izquierda y coloque el pie derecho contra la cara externa de la rodilla izquierda. Coloque el codo del brazo izquierdo sobre la rodilla derecha, sirvindose as de palanca. Tmese con la mano de la pierna estirada o si puede del tobillo de la pierna flexionada. Luego lleve el brazo derecho hacia delante, inhale y gire conjuntamente el brazo, el tronco, el cuello y apoye el brazo detrs de la espalda, cerca de la misma. Sostenga durante 20 minutos. Posteriormente inhale, levante el brazo derecho y vuelva lentamente a la posicin de partida. Practique la postura hacia el lado contrario, flexionando la pierna izquierda. Beneficios: En la Columna vertebral el objetivo principal de esta asana , es brindarle mayor flexibilidad y evitar la sacralizacin de la quinta vrtebra lumbar, es decir , su soldadura con el sacro o de remediarla cuando existan indicios de producirse. Estimula la medula espinal, los nervios espinales y los ganglios simpticos. Los msculos y ligamentos son estirados y se alargan en toda la columna en donde se produce una generosa afluencia de sangre. Los rganos abdominales resultan tonificados y masajeados por la compresin alternada de cada mitad del abdomen. El primer beneficiado es el colon ascendente, acentuando as su peraltismo. Adems de actuar sobre una porcin del intestino grueso, el rin y el hgado son estimulados durante la torsin hacia el lado derecho y el colon descendente, el bazo, el pncreas y el rin izquierdo durante la segunda mitad del asana. Esta asana combate el estreimiento y estimula todo el tubo digestivo. Diego Cano correo@diegocano.org

    16. Natalia y Gustavo en la Feria de San Isidro.

    17. Literatura Narrativa: Marcela Vanmak / 08/07/2005 "Nada nuevo bajo el sol" Marcela Vanmak. (Salta, Argentina). Profesora en Letras, participa del 'Taller de Teatro e Investigacin de La Universidad Nacional de Salta'. Taller de escritura de R. Salvatierra. Grupo de Investigaciones Literarias 'Biblioteca de La Universidad Catlica de Salta'. Becada por 'Fundacin Capacitar' para realizar intercambio cultural e investigacin sobre la realidad de los Kibutz en Israel en 1999. Publica trabajos de narrativa y lrica en revistas, diarios y pginas de Internet. Vive en Israel. 'A los refugiados' De pequea jugaba a ser invisible. Me converta en aire, en viento, en brisa y lo traspasaba todo. Esperaba una seal que indicara el instante de desaparecer: el parpadeo de una mariposa o el vuelo fugaz de un pjaro. Hubo una ocasin, en donde una luz tenue y zigzagueante me invitaba a la recreacin: un bicho con una farola en el vientre. Lo apres entre mis manos y cuanto ms lo asfixiaba, su luz se expanda vibrante y triunfal. Lo traje a casa y colocndolo dentro de una botella, lo expulse al mar... Estaba segura que sobrevivira; alguien tendra que recibir el mensaje. Mi asombro se hizo presente cuando desde la ventana de mi cuarto divis el paso seguro de un millar de bichos con farolas. Tan importante era la lumbre que lograron que la noche se hiciese da. Luego me dije que siempre utilizara el mismo artilugio: enviar mensajes en botellas al mar En algn lugar habra alguien que descodificara la seal Pero, donde yo habitaba, no haba mar, ni bichos con farolas, ni alguien que oyera o viera las botellas echadas a las olas... Era mi fantasa o artilugio del azar: me hacia etrea y emerga en otras esferas, en otros edenes e infinitosCortaba el mundo con mi respiracin y luego de expulsar el aire, estaba al otro lado de las aguas. Donde las damas (las nias), pueden salir a tomar el te con sus amigas y charlar de cosas de mujeres; comprarse vestidos con escotes y usar baadores para ingresar al mar, como mis botellas, como mis ojos de gorrin, como mi alma de pjaro. (Lo puedo hacer todo con solo pensarlo).

    18. Haba estado esperando una seal; todo este tiempo, haba estado esperando la seal. Me pregunto si este mundo (mi mundo), pertenece al otro mundo. A ese que quizs algn da acceder: no ms un mundo desmantelado y sin ventanas. Mi casa es este vestido, con una puerta en los ojos. Que siempre esta cerrada, o casi siempre. La abren los otros (desde afuera). Los fanticos, los que llegaron trayendo el infierno. Soy mujer. Cierro las cortinas desde adentro y me quedo en silencio. Esperando mi botella y mi ventana abierta al otro lado, al otro sueo de bicho con luz de farola, pero en el corazn. Me digo a mi misma: si me voy a otra casa, a otro universo, me llevo conmigo: yo soy mi hogar, yo soy el mundo La invisibilidad es ente generoso: ensueo y realidad. Realidad y ensoacin. Para alcanzar la paz de la mente y la seguridad del corazn. (No tiene nada que ver con el fervor). Es un invento que me permite tomar el triunfo: la libertad. Cuando la libertad no existe hay que concebirla. Hay que hacer como el bicho de la farola: encenderse por dentro. No voy a llorar sobre mi envoltura de silencio: voy a gritar con la expansin de la luz que es muda, pero penetra los rincones hacindolo todo transparente Luego, mis hermanas comenzaron a jugar al juego peligroso de ser ellas tambin invisibles: algunas lo consiguieron, otras no La onda expansiva de la travesura comenz a remontar el infinito y apropiarse de las mentes y de los corazones. El olor de la pobreza no molesta, es agrio y amargo; pero el olor a la libertad, despierta un picor extrao y un deseo inaudito de recobrar la identidad. La ocupacin no es una cabeza doblegada. No queremos mas ser envoltorios con la virginidad a cuestas. Queremos abrir las piernas y abrazar al amor. Eso mismo: abrir las piernas y abrazar el mundo. Cerrar el pao a la obediencia y los parpados ciegos. Es hora de que decidamos a quien dar la moneda del prodigio. La estrella con la esfinge sin tnica ni celda. Con los senos abiertos como ojos extendidos, enterrada viva, quizs, pero dentro de un mundo hecho a mi medida, a nuestra medida Un camello aqu, vale lo que un auto all. Algunas de mis hermanas valieron varios camellos. Yo, el doble que ellas. Soy pequea y de grupas estrechas. Mi padre esta contento y habla de su posible ampliacin a otros espacios y mercados Me pregunto como ser su rostro: de quien pago por m a mi padre. Ese hombre no podr nunca jams desvirgar mi alma con su deseo de bestia agazapada.

    19. Luego, mis hermanas comenzaron a jugar al juego peligroso de ser ellas tambin invisibles: algunas lo consiguieron, otras no La onda expansiva de la travesura comenz a remontar el infinito y apropiarse de las mentes y de los corazones. El olor de la pobreza no molesta, es agrio y amargo; pero el olor a la libertad, despierta un picor extrao y un deseo inaudito de recobrar la identidad. La ocupacin no es una cabeza doblegada. No queremos mas ser envoltorios con la virginidad a cuestas. Queremos abrir las piernas y abrazar al amor. Eso mismo: abrir las piernas y abrazar el mundo. Cerrar el pao a la obediencia y los parpados ciegos. Es hora de que decidamos a quien dar la moneda del prodigio. La estrella con la esfinge sin tnica ni celda. Con los senos abiertos como ojos extendidos, enterrada viva, quizs, pero dentro de un mundo hecho a mi medida, a nuestra medida Un camello aqu, vale lo que un auto all. Algunas de mis hermanas valieron varios camellos. Yo, el doble que ellas. Soy pequea y de grupas estrechas. Mi padre esta contento y habla de su posible ampliacin a otros espacios y mercados Me pregunto como ser su rostro: de quien pago por m a mi padre. Ese hombre no podr nunca jams desvirgar mi alma con su deseo de bestia agazapada. Los girasoles me miran y yo miro los girasoles. Giro como ellos, descubro que solo debo mirar al sol. Hay un cuadro, de un seor que se cort la oreja para no escuchar los pjaros. Me pregunto, serian los mismos que los mos? El estaba en un campo abierto aturdido por el acecho de los pjaros, que le corroan la mente y el alma. Yo estoy adentro, de mi misma y desde all, los girasoles me miran y los pjaros persisten en desenterrarme de mi burka y mi espanto. Silencio. Cuando trabajo en la tienda de mi padre, levanto las rejas de mis velos. Me siento agitada y victoriosa. Juego a ser invisible Me siento flotando sobre una alfombra mgica. Sueo despierta un rapto: por la persona que traspasase el hemisferio de mi soledad y de mi encierro. Que me rescate de la lgrima y de la inocencia. Un caballero, que se pare a mi lado y que no diga nada. Que sus girasoles me miren y me recorran sus pjaros. As quedare enterrada en el hemisferio de su mirada, por siempre jamsMas, dando vuelo como las aves que desean y por ello, pueden hacerlo Se trataba del infierno. Estaba segura de ello. Llegaron ellos trayendo el infierno. Nos encerraron. La dignidad no se compra. No se vende el espritu. Tena esperanzas de que el prodigio me aconteciera; mas, fue en vano: mi padre ya haba recibido el coste de mi venta. Los Nuevos Afganies le valdran para remozar la mercanca carente en el almacn.

    20. Era comerciante y sus dependencias famosas en Kandahar y Kabul. Pensaba si la malaventura de nacer mujer, nos converta en benditas, al extirparnos la pieza pudenda a edad temprana; un cdigo oculto entre casta de hombres. Senta un fro pasmoso, a pesar de que la tierra herva inflamada de llagas causadas por el sol. Ahora, recordaba todo; las ltimas nupcias que se realiz en la familia, engendraron una catstrofe inesperada: la vergenza y al punto, el posterior silencio. Otra vez el silencio que conversa como el aire, como el viento y la brisa. Mi hermana me dijo: 'Yo voy a hablar con la boca cerrada. Para que a vos no te pase. Para que estas cosas ya no nos pasen. Cometer un acto de arrojo: las salvare del abismo' Cuando, luego vi a la pobrecita: puales le haban llovido sobre el burka de su cuerpo. Haba que lavar el nombre de la familia. Nuestra familia. Que quedo bastante pulcro: mas, mi hermana, ya no exista Cuantas veces la encontr acariciando el muro que rodeaba a la casa. A veces lo hacia con fruicin: como si quisiera que por su piel, se abriera una llaga por donde drenar el padecimiento de nuestra sumisin; de nuestra suerte de mujeres islmicas de Afganistn. Le hacia dao. No tanto, como el saberse desposeda de los privilegios que gozan todos los seres humanos en el siglo de la postmodernidad. Un dolor, no se cubre con otro dolor La Guerra Civil entre grupos haba dejado al pueblo librado entre facciones y mal vivientes. La inseguridad era alimento corriente, desde que los rusos se retiraran en el noventa. La ciudad luchaba infructuosa por no caer en el caos. Mas, lo estbamos viviendo. Haba llegado el momento del juego peligroso. Como antes, estaba soando con los ojos abiertos. En esta trama, mis hermanas de gnero desertan de la congoja y se inmolan abrasadas en llamas. No quieren ya ser exigidas a parir un puado de vstagos, vivir confinadas en sus vestidos y en sus hogares. Otras, maltratadas y hasta despojadas de su dignidad y respeto. De pequea jugaba a ser invisible. Haba estado esperando una seal: ingresar dentro de una botella (patera) y librarme al mar: alguien tendr que recibir el mensaje, alguien tendr que ver mi lumbre expandirse desde el otro lado de las olas... Mas, donde yo habito no hay mar, ni bichos con farolas, ni botellas echadas al mar: hay mujeres que en un acto de arrojo, se lanzan a las llamaradas de la piedad

    21. Msica Hugo Fattoruso Biografa (documento doc.) Meloda en Candombe (MP3) El Gramillero (MP3)

    22. Nacido en Montevideo, Hugo comenz su carrera musical como un prodigioso, alumno de piano a los cuatro aos. A los nueve aos, ya formaba con su padre Antonio y hermano Osvaldo el Tro Fattoruso. En este grupo, Osvaldo fue el baterista (a la edad de cinco!), Hugo el acordeonista, y Antonio el bajista, tocando un instrumento de su propia construccin (mango de escoba como diapasn, y una nica cuerda). El Tro actuaba en festivales callejeros, interpretando los varios estilos del carnaval uruguayo. A los diecisis, Hugo tom el bajo acstico como instrumento principal, y se enrol como el miembro ms joven de los Hot Blowers, conjunto de jazz y swing que viaj por toda Amrica Latina hacia el final de la dcada de los cincuenta. Este perodo podra considerarse el segundo importante desarrollo armnico de este msico, con su concentracin y aprendizaje de la improvisacin y contrapunto musical en el jazz. Al comienzo de los aos sesenta, el rock empez a cambiar el mundo de la msica, y Hugo decidi formar al grupo Los Shakers para expresarse en ese medio, siendo l y su hermano Osvaldo los principales compositores, guitarristas, y cantantes. Los Shakers, Hugo y Osvaldo Fattoruso, Roberto "Peln" Capobianco (bajo y voz), y Carlos "Caio" Vila (batera y voz) fueron un xito rotundo en Amrica Latina, en gran parte por su imagen, pero tambin por su habilidad de combinar las complejidades de la bossa nova, el estilo urbano de la cancin uruguaya, los ritmos del candombe y la fuerza del rock en un estilo nuevo y contagioso.

    23. Ya hacia el final de la dcada de los sesenta, las influencias del jazz y del candombe llevaron a Hugo a Nueva York, donde form el conjunto Opa. Mientras Hugo tocaba el piano y sintetizadores y su hermano tocaba la batera y percusin, el tro se completa con su amigo de la niez Ringo Thielmann tocando el bajo. La mezcla que ofreci Opa, de jazz con rock, con las armonas y ritmos de Brasil, con el sabor afro-uruguayo del candombe, solt un sonido nuevo y diferente al mercado, y gener la admiracin de muchsimos grandes del ambiente del "jazz latino," que en ese momento recin empezaba a conocerse. Opa grab dos discos, "Goldenwings" y "Magic Time." La msica de Opa sirvi como importante contribucin al desarrollo musical de la prxima generacin de msicos uruguayos, y dej una indeleble marca de los Fattoruso sobre la cultura musical moderna del Uruguay. Desde este punto en adelante, Hugo recorri los Estados Unidos trabajando con una gran gama de artistas, desde Hermeto Pascoal hasta Ron Carter y los Dixie Dregs. Despus de trabajar con Milton Nascimento, Hugo vivi durante varios aos en Ro de Janeiro, donde contribuy a los proyectos de varios de los grandes de la msica brasilea, como son Djavan, Geraldo Azevedo, Chico Buarque Holanda, Nana Vasconcelos, y Toninho Horta. Hugo ha colaborado mucho con Milton Nascimento, en los discos 'Milton,' 'Journey To Dawn', 'Planeta Blue Na Estrada Do Sol', 'Angelus', y ms recientemente en el CD 'Nascimento', que gan el prestigioso premio Grammy en 1997 en la categora de World Music. Ms all de sus contribuciones en los teclados y el acorden, los arreglos de varias de las composiciones en Nascimento fueron una colaboracin entre Hugo y Milton. Por ltimo, Hugo tom de sus experiencias en Nueva York para crear su ltimo CD, Homework. Escucha los siguientes temas: Meloda en Candombe (MP3) El Gramillero (MP3)

    24. Si quieres recibir La Luz del Faro Todos los meses, durante la luna llena, escribe a: laluzdelfaro@gmail.com

    25. Hasta la prxima luna llena!

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