1 / 66

BENDITO EL QUE VIENE EN NOMBRE DEL SEÑOR

DOMINGO DE RAMOS – CICLO B. BENDITO EL QUE VIENE EN NOMBRE DEL SEÑOR. DOMINGO DE RAMOS – CICLO B. PARA ORAR y VIVIR LA PALABRA. CONTEMPLACION ACCIÓN. ORACION. MEDITACION. LECTURA. PREPARACION. BENDITO EL QUE VIENE EN NOMBRE DEL SEÑOR. DOMINGO DE RAMOS – CICLO B.

harris
Télécharger la présentation

BENDITO EL QUE VIENE EN NOMBRE DEL SEÑOR

An Image/Link below is provided (as is) to download presentation Download Policy: Content on the Website is provided to you AS IS for your information and personal use and may not be sold / licensed / shared on other websites without getting consent from its author. Content is provided to you AS IS for your information and personal use only. Download presentation by click this link. While downloading, if for some reason you are not able to download a presentation, the publisher may have deleted the file from their server. During download, if you can't get a presentation, the file might be deleted by the publisher.

E N D

Presentation Transcript


  1. DOMINGO DE RAMOS – CICLO B BENDITO EL QUE VIENE EN NOMBRE DEL SEÑOR

  2. DOMINGO DE RAMOS – CICLO B PARA ORAR y VIVIR LA PALABRA CONTEMPLACION ACCIÓN ORACION MEDITACION LECTURA PREPARACION BENDITO EL QUE VIENE EN NOMBRE DEL SEÑOR

  3. DOMINGO DE RAMOS – CICLO B Ambientación El Domingo de Ramos, pórtico de la Semana Santa, nos sitúa ante un Jesús que afronta con humildad y valentía a la vez el camino doloroso y triunfante de la liberación. Con la celebración de este domingo empezamos los días santos, para los que nos hemos venido preparando durante toda la Cuaresma. Y hoy nuestra atención debe estar en este relato de la pasión y muerte del Señor que acabamos de proclamar.

  4. DOMINGO DE RAMOS – CICLO B El Su meditación debería hacer que surgiese de nuestro corazón aquella misma profesión de fe del centurión ante Jesús clavado en la cruz: «Realmente este hombre era Hijo de Dios». Afronta con humildad y valentía a la vez el camino doloroso y triunfante de la liberación. Como Israel en su nacimiento, los que siguen sus huellas, forman el Éxodo, la gran marcha de liberación del hombre, hacia un cielo nuevo y una nueva tierra, en la que nadie oprima a nadie, en la que todos sean hermanos.

  5. DOMINGO DE RAMOS – CICLO B Nadie que se diga cristiano puede estar ausente en este camino y esta lucha hacia la liberación integral del hombre. “BENDITO EL QUE VIENE EN NOMBRE DEL SEÑOR”

  6. DOMINGO DE RAMOS – CICLO B INVOCACIÓN AL ESPÍRITU SANTO

  7. DOMINGO DE RAMOS – CICLO B Ven, Espíritu Santo, ilumina nuestra mente, nuestro corazón y nuestra voluntad para que podamos comprender, aceptar y vivir tu Palabra. Llena con tu santo poder a todos los que participamos en este encuentro para que, guiados por el Evangelio, recorramos juntos el camino de Jesús Maestro. Amén.

  8. DOMINGO DE RAMOS – CICLO B LA BIBLIA LA BIBLIA LECTURA ¿QUÉ DICE el texto?

  9. DOMINGO DE RAMOS – CICLO B 1ª. Lectura Mc. 11, 1-11: «¡Hosana! Bendito el que viene en nombre del Señor»

  10. DOMINGO DE RAMOS – CICLO B Evangelio de Jesucristo según San Marcos R/. Gloria a Ti, Señor. 1 Cuando se acercaban a Jerusalén, por Betfagé y Betania, junto al monte de los Olivos, envió a dos discípulos 2 diciéndoles: – Vayan al pueblo de enfrente y, al entrar, encontrarán un burrito atado, que aún nadie ha montado. Desátenlo y tráiganlo. 3 Y si alguien les pregunta por qué hacen eso, le dirán que le hace falta al Señor y que se lo devolverá muy pronto.

  11. DOMINGO DE RAMOS – CICLO B 4 Fueron y encontraron el burrito atado junto a una puerta, por fuera, contra el portón. Lo soltaron. 5 Algunos de los allí presentes les dijeron: –¿Por qué sueltan el burrito? 6 Contestaron como les había encargado Jesús, y los dejaron. 7Llevaron el burrito a Jesús, le echaron encima sus mantos, y Jesús se montó. 8 Muchos alfombraban con sus mantos el camino, otros con ramos cortados en el campo. 9 Los que iban delante y detrás gritaban: – ¡Hosana! Bendito el que viene en nombre del Señor.

  12. DOMINGO DE RAMOS – CICLO B 10 Bendito el reino de nuestro padre David que llega. ¡Hosana en las alturas! 11 Entró en Jerusalén y se dirigió al templo. Después de inspeccionarlo todo, como era tarde, volvió con los Doce a Betania. Palabra del Señor R/. Gloria a Ti, Señor Jesús.

  13. DOMINGO DE RAMOS – CICLO B 2ª. Lectura Is. 50, 4-7: «El Señor me ha dado una lengua de discípulo»

  14. DOMINGO DE RAMOS – CICLO B La comunidad cristiana que escribió los Evangelios vio pronto en la figura del Siervo de Yahvé, una imagen fecunda y apta para expresar lo que era para ella Jesús, el crucificado y resucitado. El Siervo de Yahvé es mediador de salvación. Mediador con rasgos mosáicos y proféticos. Su unción profética es para una misión: enviado a los «abatidos» (Is. 50, 4; Miq. 11, 28), a los ciegos y presos (Is. 24, 7; 49, 9; 50, 10), en definitiva, a todos los hombres. El es quien va a cargar con nuestros pecados, para liberarnos de ellos.

  15. DOMINGO DE RAMOS – CICLO B Su misión, será volver a unir y conducir de nuevo a los pueblos a Yahvé. De esta manera se convierte el mismo personalmente en «alianza para el pueblo» (Is. 42, 7; 49, 8). Así es un Moisés nuevo que va a conducir a un pueblo nuevo a un nuevo Éxodo. Es decir, inicia, en conexión con el Éxodo del Antiguo Testamento, un movimiento nuevo de liberación de toda esclavitud y de toda opresión, y así una nueva Pascua, en la que Dios se mostrara a su Pueblo en la liberación de la humanidad, con mano poderosa. Ahí se dará la experiencia de Dios.

  16. DOMINGO DE RAMOS – CICLO B Su misión profética lo conecta con la Palabra (Is. 50, 4) y con la implantación de nuestro mundo de un «orden justo» (Hab. 1, 4), querido y revelado por Dios, como «garantía y presupuesto de la salvación universal». Hacia el Mediador apuntan las esperanzas de Israel y en definitiva, de la humanidad, y llevará las características del cuadro escatológico de la fe cristiana: Salvador único y absoluto, superando las limitaciones de una mediación que quede circunscrita únicamente a lo intramundano.

  17. DOMINGO DE RAMOS – CICLO B Salmo responsorial Sal. 22(21) «¡Dios mío, Dios mío!, ¿por qué me has abandonado?»

  18. DOMINGO DE RAMOS – CICLO B El salmista expresa su confianza en la ayuda del Señor. En el Nuevo Testamento en este salmo se reconoce a Cristo en su pasión, la esperanza de no morir queda ratificad en la nueva vida de Cristo Resucitado. Jesús Salvador, verdaderamente solidario con el ser humano, asume la experiencia de un hombre que está en las últimas y ha gritado la profundidad de su angustia. Cristo ha experimentado en su propia carne la situación de millones de hombres que han estado en las últimas.

  19. DOMINGO DE RAMOS – CICLO B Millones de hombres están en las últimas, a punto de desesperarse y de su boca salen las mismas expresiones del salmista.  El salmo es siempre actual. Como es actual el sufrimiento de los hombres. Como es actual el grito de quien está roto de cuerpo y espíritu. Por eso el salmo 22 es recitado continuamente en la tierra.  No hay que esforzarse mucho para encontrar personas que recitan este salmo con un timbre de dolorosa autenticidad. 

  20. DOMINGO DE RAMOS – CICLO B 2a. Lectura Flp. 2, 6-11 «Jesús tomó la condición de esclavo»

  21. DOMINGO DE RAMOS – CICLO B Cristo, «siendo de condición divina, se despojó de su rango»... Se sobreentiende aquí el parangón con Adán, quien no siendo de tal condición quiso robarla. Pablo propone a la comunidad de Filipos el ejemplo del nuevo Adán, Cristo..Este aceptó reparar, mediante la humildad y la obediencia hasta la muerte más ignominiosa, la soberbia desobediencia del primer Adán, que precipitó a todo el género humano en el pecado y la muerte (cf. Ro. 5,18s). Unido con una exhortación al amor al prójimo como comunión y servicio, convirtiendo a los demás en norma superior, nos transmite este himno. El amor al prójimo ha de tener las características del proceso de descenso de Cristo que se despoja de si mismo (borra su yo), alienándose en los demás, asumiendo la existencia de los otros, como cumplimiento de lo que es la más autentica y profunda voluntad del Padre (obediencia como misión, misión como comunión con Dios), hasta entregar la vida por los demás.

  22. DOMINGO DE RAMOS – CICLO B Por eso, es exaltado. Es decir, obtiene mayor gloria de la que poseía. — Esta es la imagen del amor al prójimo: solidaridad con la condición de esclavos, asumiendo la obedienciahasta lo último, para vivir totalmente al servicio de los demás. Una de las imágenes que parecen actuar aquí en el fondo es la del Siervo. Por su carácter hímnico, permite y parece que tiene otras resonancias, como podrían ser el hombre-primigenio, etc. LA BIBLIA LA BIBLIA

  23. DOMINGO DE RAMOS – CICLO B Pasión de Nuestro Señor Jesucristo Mc. 14,1-15,47 «Jesús tomó la condición de esclavo»

  24. DOMINGO DE RAMOS – CICLO B PASIÓN DE NUESTRO SEÑOR JESUCRISTO SEGÚN SAN MARCOS R/. Gloria a Ti, Señor. (Forma breve) Mc. 15, 1-47 1 Ni bien amaneció, el Consejo en pleno, sumos sacerdotes, ancianos y letrados se pusieron a deliberar. Ataron a Jesús, lo condujeron y se lo entregaron a Pilato. 2 Pilato lo interrogó:

  25. DOMINGO DE RAMOS – CICLO B – ¿Eres tú el rey de los judíos? Jesús contestó: –Tú lo dices. 3 Los sumos sacerdotes lo acusaban de muchas cosas. 4Pilato lo interrogó de nuevo: –¿No respondes nada? Mira de cuántas cosas te acusan. 5 Pero Jesús no le contestó, con gran admiración de Pilato. 6 Para la fiesta solía dejarles libre un preso, el que el pueblo pedía..

  26. DOMINGO DE RAMOS – CICLO B 7 Un tal Barrabás estaba encarcelado con otros amotinados que en una revuelta habían cometido un homicidio. 8 La gente subió y empezó a pedirle el indulto acostumbrado. 9Pilato les respondió: –¿Quieren que les suelte al rey de los judíos? 10 Porque comprendía que los sumos sacerdotes lo habían entregado por envidia.11 Pero los sumos sacerdotes incitaron a la gente para que pidieran más bien la libertad de Barrabás.

  27. DOMINGO DE RAMOS – CICLO B 12Pilato respondió otra vez: –¿Y qué hago con el [que llaman] rey de los judíos? 13 Gritaron: –¡Crucifícalo! 14 Pero Pilato dijo: –Pero, ¿qué mal ha hecho?Ellos gritaban más fuerte: –¡Crucifícalo! 15Pilato, decidido a dejar contenta a la gente, les soltó a Barrabás y a Jesús lo entregó para que lo azotaran y lo crucificaran.

  28. DOMINGO DE RAMOS – CICLO B La burla de los soldados (Mt. 27,27-31; cfr. Jn. 19,2s) 16 Los soldados se lo llevaron dentro del palacio, al pretorio, y convocaron a toda la guardia. 17 Lo vistieron de púrpura, trenzaron una corona de espinas y se la colocaron. 18 Y se pusieron a hacerle una reverencia: ¡Salud, rey de los judíos! 19 Le golpeaban con una caña la cabeza, le escupían y doblando la rodilla le rendían homenaje.

  29. DOMINGO DE RAMOS – CICLO B 20 Terminada la burla, le quitaron la púrpura, lo vistieron con su ropa y lo sacaron para crucificarlo. Muerte de Jesús (Mt. 27,32-56; Lc. 23,26-49; cfr. Jn. 19,17-30) 21 Pasaba por allí de vuelta del campo un tal Simón de Cirene–padre de Alejandro y Rufo–, y lo forzaron a cargar con la cruz. 22 Lo condujeron al Gólgota –que significa «Lugar de la Calavera»–.

  30. DOMINGO DE RAMOS – CICLO B 23 Le ofrecieron vino con mirra, pero él no lo tomó. 24Lo crucificaron y se repartieron su ropa, echando a suertes lo que le tocara a cada uno. 25Eran las nueve de la mañana cuando lo crucificaron. 26 La inscripción que indicaba la causa de la condena decía: El rey de los judíos. 27 Con él crucificaron a dos asaltantes, uno a la derecha y otro a la izquierda. 28 [[–Y se cumplió la Escritura que dice: y fue contado entre los pecadores.]]

  31. DOMINGO DE RAMOS – CICLO B 29 Los que pasaban lo insultaban moviendo la cabeza y decían: –El que derriba el santuario y lo reconstruye en tres días, 30que se salve, bajando de la cruz. 31 A su vez los sumos sacerdotes, burlándose, comentaban con los letrados: –Ha salvado a otros y él no se puede salvar. 32El Mesías, el rey de Israel, baje ahora de la cruz para que lo veamos y creamos. Y también lo insultaban los que estaban crucificados con él.

  32. DOMINGO DE RAMOS – CICLO B 33 Al mediodía se oscureció todo el territorio hasta media tarde. 34 A esa hora Jesús gritó con voz potente: –Eloieloi lema sabaktani–que significa: Dios mío, Dios mío, ¿por qué me has abandonado?–. 35 Algunos de los presentes, al oírlo, comentaban: –Está llamando a Elías. 36 Uno empapó una esponja en vinagre, la sujetó a una caña y le ofreció de beber diciendo: –¡Quietos! A ver si viene Elías a librarlo.

  33. DOMINGO DE RAMOS – CICLO B 37Pero Jesús, lanzando un grito, expiró. 38 El velo del santuario se rasgó en dos de arriba abajo. 39 El centurión, que estaba enfrente, al ver cómo expiró, dijo: –Realmente este hombre era Hijo de Dios. 40 Estaban allí mirando a distancia unas mujeres, entre ellas María Magdalena, María, madre de Santiago el Menor y de José, y Salomé, 41 quienes, cuando estaba en Galilea, le habían seguido y servido; y otras muchas que habían subido con él a Jerusalén.

  34. DOMINGO DE RAMOS – CICLO B Sepultura de Jesús (Mt. 27,57-61; Lc. 23,50-56; cfr. Jn. 19,38-42) 42 Ya anochecía; y como era el día de la preparación, víspera de sábado, 43 José de Arimatea, consejero respetado, que esperaba el reino de Dios, tuvo la osadía de presentarse a Pilato a pedirle el cuerpo de Jesús. 44Pilato se extrañó que ya hubiera muerto. Llamó al centurión y le preguntó si ya había muerto. 45 Informado por el centurión, le concedió el cuerpo a José. 46 Éste compró una sábana, lo bajó de la cruz, lo envolvió en la sábana y lo colocó en un sepulcro excavado en la roca.

  35. DOMINGO DE RAMOS – CICLO B Después hizo rodar una piedra a la entrada del sepulcro. 47 María Magdalena y María de José observaban dónde lo habían puesto. Palabra del Señor. R/. Gloria a Ti, Señor Jesús. «VERDADERAMENTE ESTE HOMBRE ERA EL HIJO DE DIOS»

  36. DOMINGO DE RAMOS – CICLO B Re-leamos la Palabra para Interiorizarla Es importante que nos respondamos a las preguntas: ¿Qué personajes aparecen en el texto que hemos leído?: Jesús, Integrantes del Sanedrín, Pilatos, Herodes, la multitud del pueblo, los apóstoles, las mujeres piadosas… ¿Qué pregunta Pilatos a Jesús?, ¿Qué les responde Jesús? ¿Con quienes se encuentra Jesús en el camino del calvario? ¿Cuáles son las palabras de Jesús desde la cruz?

  37. DOMINGO DE RAMOS – CICLO B La narración de la Pasión, en San Marcos, es sobria, condensada, incisiva: los acontecimientos hablan por sí mismos, el Protagonista calla. La irrisión que golpea los aspectos de su misión (Mc. 14,65; 15, 29.31s) no encuentra respuesta. Verdadero hombre, en Getsemaní (Mc. 14,33-35) cae a tierra orando, en un gesto de súplica y abandono.

  38. DOMINGO DE RAMOS – CICLO B Verdadero Hijo de Dios, puede invocar a Dios, el Altísimo, con el apelativo de «Abba», «Papá»... En el relato de la pasión aparecen, en contraste, poderes civiles y religiosos, y del mismo pueblo y discípulos que le abandonan. Y, por otra parte, el Señor soberano que elige la fidelidad y está por encima, con libertad suprema interior y exterior.

  39. DOMINGO DE RAMOS – CICLO B El Hijo del Hombre(figura de poder) será entregado (se une a la imagen de poder del Hijo del Hombre, la pasión; corrección típicamente cristiana al mesianismo y a las figuras vetero-testamentarias). Sin embargo, va libremente a la pasión y a la muerte (Mc.14, 43-52), asumiendo la voluntad del Padre (Siervo de Dios = Mc.14, 326-42). Asume y vive libre y activamente, la pasividad y opresión de los poderes que le llevan (y sin embargo va libremente) a la muerte.

  40. DOMINGO DE RAMOS – CICLO B El Hijo del Hombre(figura de poder) será entregado (se une a la imagen de poder del Hijo del Hombre, la pasión; corrección típicamente cristiana al mesianismo y a las figuras vetero-testamentarias). Sin embargo, va libremente a la pasión y a la muerte (Mc.14, 43-52), asumiendo la voluntad del Padre (Siervo de Dios = Mc.14, 326-42). Asume y vive libre y activamente, la pasividad y opresión de los poderes que le llevan (y sin embargo va libremente) a la muerte.

  41. DOMINGO DE RAMOS – CICLO B Poderes civiles y religiosos, y del mismo pueblo y discípulos que le abandonan

  42. LA BIBLIA LA BIBLIA DOMINGO DE RAMOS – CICLO B MEDITACION ¿QUÉ NOS DICE el texto?

  43. DOMINGO DE RAMOS – CICLO B Diferentes actitudes En este domingo con el que comenzamos la celebración de la Semana Santa, la Palabra de Dios nos presenta dos acontecimientos distintos: • Uno en el que se recuerda la entrada triunfal de Jesús en Jerusalén. • El otro es la Pasión del Señor. Llama la atención lo diferentes que son las actitudes de quienes aparecen rodeando a Jesús en ambos momentos. En el primero hemos visto como lo aclaman como el Hijo de David, como gritan ¡Hosanna!, como alfombran su camino y lo reciben como alguien grande que les llena de júbilo...

  44. DOMINGO DE RAMOS – CICLO B La subida a Jerusalén es el cumplimiento de un signo mesiánico y el pueblo así lo reconoce: «bendito el que viene en el nombre del Señor», «Hijo de David», portador de las promesas del Reino verdadero y definitivo (escatológico). Jesús aparece así como el Mesias que va a liberar al pueblo, por el camino absurdo de la pasión y muerte. La vitalidad de su unción (Mesías) aparece poderosamente al entrar como jefe victorioso e invencible en Jerusalén, sin nada más que su persona, con positivos signos de humildad y debilidad. Sin embargo, al escuchar la Pasión vemos cómo dejan de aclamarle y le dejan solo, lo traicionan sus amigos e incluso lo niegan, lo abandonan todos, y la muchedumbre se exalta para gritar que lo crucifiquen. En demasiadas ocasiones nos pasa a nosotros lo mismo que a quienes rodeaban a Jesús en sus últimos días; queremos ser sus amigos, pero nos cansamos; queremos seguirle, pero nos resulta demasiado exigente lo que nos pide; o tenemos miedo de defenderle, de hacerle presente, de hablar de Él como el Señor... A veces incluso nos empeñamos tanto en que Dios tiene que hacer las cosas como nosotros queremos que, si no es así, lo negamos, decimos que no existe o que no es un Dios bueno. Muchos no le reconocieron como Mesías porque no aceptaban que el prometido viniera montado en un borrico o que fuese humilde, pobre, servicial; decían que tenía que presentarse majestuoso.

  45. DOMINGO DE RAMOS – CICLO B Sin embargo, al escuchar la Pasión vemos cómo dejan de aclamarlo y le dejan solo, lo traicionan sus amigos e incluso lo niegan, lo abandonan todos, y la muchedumbre se exalta para gritar que lo crucifiquen. En demasiadas ocasiones nos pasa a nosotros lo mismo que a quienes rodeaban a Jesús en sus últimos días; queremos ser sus amigos, pero nos cansamos; queremos seguirle, pero nos resulta demasiado exigente lo que nos pide; o tenemos miedo de defenderle, de hacerle presente, de hablar de Él como el Señor...

  46. DOMINGO DE RAMOS – CICLO B A veces incluso nos empeñamos tanto en que Dios tiene que hacer las cosas como nosotros queremos que, si no es así, lo negamos, decimos que no existe o que no es un Dios bueno. Muchos no le reconocieron como Mesías porque no aceptaban que el prometido viniera montado en un borrico o que fuese humilde, pobre, servicial; decían que tenía que presentarse majestuoso.

  47. DOMINGO DE RAMOS – CICLO B Para interrogarnos Podemos preguntarnos, pues, cómo aclamamos nosotros a Jesús. Llevar palmas o ramos es el signo de que queremos ser sus discípulos, que lo reconocemos como el Mesías, como el Señor, como el Rey... Reconocemos que nuestras imágenes de Dios no pueden ser otras que las que El mismo nos dio: las de un Dios que se arrodilla a lavar los pies, que es misericordioso y paciente, que es manso, humilde y acepta dar la vida, y que es fiel hasta las últimas consecuencias.

  48. DOMINGO DE RAMOS – CICLO B Podemos preguntarnos también cuándo estamos abandonándolo, cuándo le damos la espalda en nuestra vida porque no nos conviene o nos exige demasiado... La reflexión y la oración sobre nuestras contradicciones e infidelidades puede ser una buena manera de acercarnos al Señor durante esta semana y así, reconociendo con humildad nuestras culpas, dejar que surja en nuestro corazón el deseo de corresponderle a tanto como nos ama. «VERDADERAMENTE, ESTE HOMBRE ERA EL HIJO DE DIOS»

  49. DOMINGO DE RAMOS – CICLO B Allá donde estemos estos días, no nos dejemos arrastrar por el deseo de vacaciones o de consumir el ocio que se nos propone, sino que procuremos tener presente que estas son las fiestas más importantes de los cristianos. Acudamos a las celebraciones si es posible, o al menos dediquemos tiempo a la reflexión de lo que celebramos y a la oración, y así sea para nosotros una Semana Santa de verdad.

  50. DOMINGO DE RAMOS – CICLO B Nuestro compromiso de hoy Ungidos por el bautismo y la confirmación, hemos de realizar nuestra vitalidad cristiana, solidarizándonos con todos los oprimidos, asumiendo nuestro pecado y el de los demás, luchando a su lado para liberarnos del ámbito de la muerte y liberar a los demás. La Palabra de hoy nos descubre y desenmascara nuestra situación de hombres necesitados de liberación y nos descubre al Libertador Jesús el Cristo. Con Jesús el Cristo hay que caminar en el nuevo Éxodo en una lucha por la liberación de toda la humanidad.

More Related