1 / 1

En pleno siglo XVII, el Romancero vuelve a ser motivo de inspiración para él.

En pleno siglo XVII, el Romancero vuelve a ser motivo de inspiración para él. Aquí tenemos un ejemplo: un romance dedicado a Isabel de Urbina (Belisa), primera esposa del poeta, a quien abandonó a las dos semanas de casarse para alistarse en la marina.

macon-dyer
Télécharger la présentation

En pleno siglo XVII, el Romancero vuelve a ser motivo de inspiración para él.

An Image/Link below is provided (as is) to download presentation Download Policy: Content on the Website is provided to you AS IS for your information and personal use and may not be sold / licensed / shared on other websites without getting consent from its author. Content is provided to you AS IS for your information and personal use only. Download presentation by click this link. While downloading, if for some reason you are not able to download a presentation, the publisher may have deleted the file from their server. During download, if you can't get a presentation, the file might be deleted by the publisher.

E N D

Presentation Transcript


  1. En pleno siglo XVII, el Romancero vuelve a ser motivo de inspiración para él. Aquí tenemos un ejemplo: un romance dedicado a Isabel de Urbina (Belisa), primera esposa del poeta, a quien abandonó a las dos semanas de casarse para alistarse en la marina. De pechos sobre una torre que la mar combate y cerca mirando las fuertes naves que se van a Inglaterra, las aguas crece Belisa llorando lágrimas tiernas diciendo con voces tristes al que se aparta y la deja: «Vete, cruel, que bien me queda en quien vengarme de tu agravio pueda.» “No quedo con solo el hierro de tu espada y de mi afrenta, que me queda en las entrañas retrato del mismo Eneas, y aunque inocente, culpado, si los pecados se heredan; mataréme por matarle y moriré porque muera”. «Vete, cruel, que bien me queda en quien vengarme de tu agravio pueda.»

More Related