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LIBERTAD Me siento libre porque la música me hace bailar y como me gusta tanto, me tomo la libertad de hacer todo lo que yo quiera, desde ponerme a hacer el pino a bailar a la pata coja. No me da pereza escuchar música y ponerme a bailar, tanto si es por la mañana como si es muy tarde en los bailes de las fiestas del pueblo.
DESAHOGO Con la música me desahogo, por ejemplo cuando estoy enfadada o nerviosa me pongo la música y empiezo a bailar dejándome llevar por la melodía. A veces me pongo música y me desahogo cantando pero a la vez gritando o hago como si fuera una estrella del rock dando un concierto.
FUERZA La música me da fuerza o me hace sentirme fuerte, porque le pongo ganas y cada vez la siento más en el corazón. También porque me hace sentir como más mayor que los demás. Me parece que yo soy la mejor y que si yo no estuviera no habria tanta chispa a la hora de bailar. Si a la gente no le gustase la música y el baile seria un mundo aburrido, serio y sin ganas de pasarlo bien con una sola canción.
ALEGRIA La música me transmite alegría porque cuando la escucho o bailo me entran ganas de sonreír y hacer que desde esa canción nazca una nueva fan de la música y del baile. También porque creo que no solo los importantes tienen su merito, sino que todas las personas tendrían que tener una oportunidad o una vez para conseguir brillar en el escenario.
COMPAÑIA La música me hace sentir acompañado, porque cuando estas solo y pones música es como si miles de personas te rodearan cantando, bailando o interpretando. También te acompaña porque con el canto sientes que esa persona esta contigo o tu estas con ella.
RELAJACION La música a poco volumen o tranquila relaja el cuerpo o incluso te ánima a echarte una siesta. La música relajante se usa para hacer yoga o para bailar sobretodo la clase de baile como son el lírico o el jazz-fusión. Te relajas y el cuerpo descansa o lo agotas según que hagas. Esta música sirve también para desahogarse de todos los problemas o penas que uno tenga.
VALOR Me transmite valor, el valor de salir a un escenario o a una pista de baile y decirte a ti mismo que puedes, que lo vas a hacer bien y que nadie te lo va a impedir.
