Nuevas realidades Nuevas comunidades

1. Nuevas realidadesNuevas comunidades XV Semana de Vida Consagrada Dra. Barbara Andrade

2. 2 Nuevas realidades Hemos pasado de una visi�n est�tica de la realidad a otra din�mica Esto significa que nuestra visi�n ya no es ni puede ser uniforme: todo es plural, interpretable y discutible No se sabe de antemano que las cosas �son as� y mucho menos que �deben ser as� Para entender las implicaciones, examinemos nuestras percepciones

3. 3 Nuevas realidades � Nuestras percepciones est�n condicionadas de manera m�ltiple en este orden descendiente: nacionales socioculturales familiares / grupales personales

4. 4 Nuevas realidades � Lo nuevo no son los condicionamientos, sino m�s bien nuestra conciencia de ellos Esto es porque hoy tendemos a ser multidisciplinarios Los condicionamientos se convierten en nuestra manera de ver-percibir la realidad, porque nos los apropiamos La mayor parte de esta apropiaci�n es inconsciente Es decir, no vemos la realidad �como es�, sino como nos parece y aparece

5. 5 Nuevas realidades � Nuestro �nico acceso a la �realidad� es compartir nuestras percepciones, para que quepan las interpretaciones m�s diversas �sta es una manera de hacer parcialmente conscientes nuestros condicionamientos � o �cegueras� No sabemos que nos comportamos como t�picas mexicanas, miembros de un determinado estrato social, formadas y traumadas en determinadas familias o que transparentamos prejuicios de doctrina de fe o profesionales

6. 6 Nuevas realidades � El di�logo con las dem�s nos hace caer en la cuenta de lo que tenemos en com�n, en medio de nuestras mayores diferencias y hace parcialmente conscientes los condicionamientos inconscientes Por eso, el di�logo no es una �concesi�n�, sino una exigencia interna, signo de que somos b�squeda de ver y entender Solo en la pr�ctica del di�logo podremos encontrar nuestra propia identidad

7. 7 Nuevas realidades � A causa de nuestros m�ltiples condicionamientos todas nuestras percepciones son distorsionadas Este es un rasgo importante de lo que, en teolog�a, llamamos �pecado original� Las percepciones menos inconscientes son las personales: aun en todos los condiconamientos heredados e inconscientes construimos percepciones propias, conscientes y reflexionadas

8. 8 Nuevas realidades � Sin embargo, tampoco las percepciones personales se escapan de la distorsi�n omnipresente Dependen de la totalidad de nuestros condicionamientos, de nuestras circunstancias concretas, de nuestras experiencias y capacidades y de nuestros procesos de aprendizaje de di�logo Esto nos lleva a considerar la vida en comunidad

9. 9 Nuevas comunidades Las inescapables distorsiones de nuestras percepciones hacen que la convivencia humana sea casi imposible � algo que constatamos cada d�a Aqu� entra la necesidad de dialogar, pero tambi�n la tarea de cada comunidad creyente y religiosa: Dar testimonio de que, en la fe, es posible convivir, aun en medio de los conflictos

10. 10 Nuevas comunidades � Entonces, la cuesti�n del estado de nuestras comunidades es una cuesti�n de la validez de nuestro testimonio Conforme a lo que dijimos de las distorsiones inevitables, el conflicto no es un estado excepcional, sino normal y necesario No se trata de encubrirlo, sino de ver en qu� consiste y de aprender a manejarlo Manejarlo y resolverlo como se pueda es tarea del aprendizaje del di�logo

11. 11 Nuevas comunidades � Una comunidad sin conflicto nunca ha existido y nunca existir� Precisemos m�s los conflictos: A los condicionamientos de los que hablamos se agregan las caracter�sticas personales y los trastornos de personalidad y los niveles de angustia Todas tenemos nuestra historia personal: traumas, heridas no cicatrizadas, patrones de conducta aprendidos pero mal adaptados

12. 12 Nuevas comunidades � Tenemos dificultades con el control de nuestros impulsos En nuestro sistema cultural patriarcal y machista todas somos en mayor o menor grado dependientes, aunque no lo quisi�ramos admitir Compensamos la dependencia con la imitaci�n inconsciente de conductas supuestamente masculinas de agresi�n y exceso de autoridad

13. 13 Nuevas comunidades � Compensamos la debilidad de nuestro yo con manipulaci�n, alianzas c�mplices y estallidos emocionales Les recuerdo que todo esto es �normal�, com�n y corriente y, adem�s, en gran parte inconsciente Entonces, �c�mo podemos aprender a manejar estas realidades?

14. 14 Nuevas comunidades � Nuestro replanteamiento de la �realidad� nos hace caer en la cuenta de unas falacias inconscientes y problem�ticas: 1. La falacia de que podemos hacer lo que queremos y lo que se nos �manda�. El hecho es que queremos, pero no podemos; que somos como somos; pero s� podemos aprender a dialogar y a entender Los �prop�sitos de enmienda� no cambian nada y las �rdenes tampoco Lo �nico que puede producir un cambio de conducta es un cambio de percepci�n

15. 15 Nuevas comunidades � Y el cambio de percepci�n solo se da en la interacci�n dialogal y gracias a los conflictos 2. La falacia de la �renuncia a s� misma�. Si pudi�ramos renunciar a nosotras mismas, en la medida en la que lo lograr�amos perder�amos nuestra identidad y funcionalidad Cada persona es b�squeda de su identidad y solo la puede lograr en la interacci�n con las y los dem�s: la positiva y la negativa. Somos quienes somos �gracias� a los y las dem�s

16. 16 Nuevas comunidades � Solo en la medida en la que lleguemos a construir nuestra identidad podremos aportar algo a una comunidad Y al lograr una identidad cada vez m�s acertada, aportamos tanto a los necesarios conflictos como a su superaci�n Est� bien que seamos diferentes e incompatibles. Solo as� tiene sentido aprender a convivir y compartir El presupuesto para la comuni�n es la diferencia

17. 17 Nuevas comunidades � 3. La falacia de la importancia del sacrificio. La idea del sacrificio tiene una larga y dolorosa tradici�n en la Iglesia No es evang�lica, sino que proviene del Antiguo Testamento Seg�n lo que dijimos de la importancia de la identidad, nadie ni puede ni debe sacrificarse a s� mismo En cambio, hemos de ser fieles en nuestro testimonio de que vivir en comunidad es posible Jes�s no se sacrific�, sino que fue fiel al encargo de su Padre hasta el final

18. 18 Nuevas comunidades � 4. La falacia de �tener la raz�n�. Nadie puede tener �la raz�n�, porque la raz�n depende de las percepciones y todas ellas son distorsionadas Hay razones y racionamientos. La raz�n es una capacidad de razonar, no un acceso privilegiado a la �realidad� o a la �verdad� La llamada realidad es la necesidad de dialogar, compartir percepciones y aprender a convivir y compartir Tambi�n es la obligaci�n de tener en cuenta las posibles consecuencias de las propias acciones

19. 19 Nuevas comunidades � �Qu� podemos hacer para salir de estas falacias? Todas las falacias que nombramos tienen una larga tradici�n y nos las hemos apropiado inconscientemente Esto hace sumamente dificil su superaci�n, pero podemos dar una serie de pasos Identificar no solo los problemas de la congregaci�n, sino los problemas concretos de esta comunidad concreta y de las personas que la integran Identificar con cu�les elementos contamos para tratar de resolver los problemas y cu�les son nuestras expectativas

20. 20 Nuevas comunidades � 3. No tener miedo de llamar los conflictos por su nombre 4. No tener miedo de admitir los propios errores y dificultades; es demasiado evidente que los tenemos 5. No juzgar, sino tratar de entender. �ste es mensaje evang�lico y presupuesto psicoterap�utico a la vez 6. No descalificar a nadie y si nos ha pasado, disculparnos; las descalificaciones solo revelan percepciones distorsionadas

21. 21 Nuevas comunidades � 7. Poner cuanto suceda en la perspectiva de la fidelidad al testimonio que queremos dar, no en la de una supuesta �perfecci�n� o correspondencia a un �modelo� (ambas son ficticias) 8. Tener siempre presente que la �nica palabra de Dios que hay es una palabra humana: palabra de perd�n y de aceptaci�n. De ella hemos de dar testimonio

22. 22 Nuevas comunidades � 9. Entender que la �nica autoridad verdadera se rige por la fidelidad a la tarea del testimonio 10. Respetar siempre los procesos de aprendizaje de di�logo y de convivencia. Los procesos se pueden encauzar y acompa�ar; no se puede intervenir en ellos

23. 23 Nuevas comunidades � Aprendan a ser ustedes mismas y ay�dense mutuamente en este aprendizaje. Tengan confianza y esperanza, no miedo