70 likes | 242 Vues
MÚSICA PARA LA VIDA. Historias de vida. Otilia Fernández Andrea Delgado.
E N D
MÚSICA PARA LA VIDA Historias de vida Otilia Fernández Andrea Delgado
Esta es la razón de que nosotras hayamos elegido la música y la historia y evolución de nuestro coro para el proyecto “Historias de Vida” que patrocina La Caixa y que tanto nos ayuda a progresar y mantenernos activos. Presentación de Otilia "Dicen que la música es el manjar del alma“ Soy Otilia Fernández González. Nací al rumor del mar, un mes de mayo del siglo pasado y una de mis pasiones confesables es la música. Por eso, ya jubilada y con júbilo, me incorporo al Coro de Mayores de mi pueblo natal, Luanco, donde descubro lo que representa la música coral: una actividad enriquecedora que comparto con otras coristas, donde aprendemos ha utilizar el lenguaje musical y nos superamos e implicamos emocionalmente. Donde nos marcamos grandes retos, para nuestra edad como la “Misa del Corazón de María”, compuesta por el candasín Pedro Braña, o el Ave Verum de Mozart, aparte de otras obras profanas de grandes autores.
Presentación de Otilia • Educación musical en mi niñez no había. En la escuela se cantaba, y cantando aprendí la tabla de multiplicar: • Dos por dos cuatro; y frente al mapa de España, los puntos cardinales que así nombrados son: Oeste, Sur, Este y Norte o Septentrión. • Y con el mismo soniquete frente al mismo mapa, la maestra iniciaba la otra lección: • Aprended, niñas queridas, a conocer nuestra patria porque deseo la améis, con la vida y con el alma. Al sur está Andalucía, al noreste de ella, Murcia, más al norte está Valencia, más al norte Cataluña; hay una región central, no tiene mar ni frontera, su capital es Madrid, su nombre Castilla Nueva. • Y así, cantando, aprendí la Geografía Española.
Presentación de Andrea Me llamo Andrea Delgado, participo en el cursillo patrocinado por La Caixa, del Centro para Mayores de Luanco "Historias de Vida“. Pertenezco al Coro de Mayores de dicho Centro. Y como para muchas personas, la música para mi, es una de las cosas mas bellas e importantes de la vida; sentirla es algo que no se puede explicar. ¡Qué yo sea capaz de cantar obras de Mózart, de Palestrina y de tantos otros compositores, me llena de orgullo y satisfacción. Desde aquí, invito a todas las personas que les guste cantar, ha participar con nosotras y también quiero animarlas a que se apunten a los cursos de Informática pues las personas mayores no debemos quedarnos al margen de las nuevas tecnologías pues aún podemos aprovechar las ventajas que nos ofrece Internet.
Historia del Coro El Coro del Centro Social para Mayores de Luanco fue fundado en 1984, a iniciativa de D. Carlos Antuña Vázquez, con la finalidad de abrir cauces de ámbito sociocultural y recreativo para las personas mayores. Se compone de treinta y seis voces mixtas y está dirigido por Facundo Artime García, quien ha impulsado, no sólo la divulgación de polifonía variada, sino también la formación músico-vocal de sus componentes y la esmerada selección e interpretación de los repertorios. El coro inició su actividad en el año 1985, al participar en los actos de los Concursos Literarios sobre la Tercera Edad, celebrados en Avilés. En 1989 viajó a Madrid para dar un concierto en el Centro Asturiano. A partir de esa fecha realizó numerosa giras por varias comunidades autónomas, todas ellas muy interesantes que os seguiré contando.
Historia del Coro Por ejemplo, un concierto en Bruselas, organizado por la Comune de Saint Gilles y promovido por la Embajada Española, en 1992 y varios conciertos en los Centros Asturianos de Lausana y Ginebra (Suiza), en 1997. Con motivo del "Xacobeo 2004" y hasta la fecha, se realizaron varios desplazamientos por España participando en relevantes actos socio-culturales. Por todo ello este coro es sin duda, un destacado referente entre las formaciones musicales de similares características y contribuye, en gran medida, a enriquecer el valioso patrimonio de la música coral asturiana.
Historia del Coro Las teclas amarillas de mi piano, sonando en el silencio vespertino, han mostrado a mi mente que en lo humano hay siempre unos vislumbres de divino.Sufro por estar solo y tan lejano de alguien que separó de mi el destino ¿Dónde hallar el espirítu, mi hermano, que anulara mi tedio libertino?Y así oyendo aquel lírico instumento, dormido al arrullar el compás lento, sentía en mi interior cosas sin nombre... y mi alma decía: este piano sonando en una tarde de verano casi me reconcilia con el hombre...Andrés González Blanco Escritor y poeta luanquín